sábado, 30 de junio de 2012

El golpe mediático en Paraguay



El golpe mediático en Paraguay
Alejandra Soifer y Santiago Mayor El Golpe de Estado en Paraguay fue impulsado a partir de una supuesta crisis de gobernabilidad. La concentración de la propiedad de los medios de comunicación es una de las claves para entender el nivel de incidencia de este relato.
Podría ser trillado decir que los medios de comunicación son un actor político para nada neutral en los conflictos por el poder. Con el golpe de Estado en Paraguay, la historia se repite: los medios hegemónicos paraguayos rápidamente actuaron, tras la masacre de Curuguaty, para construir un relato de crisis política de gobernabilidad que estigmatizara a los campesinos y que responsabilizara al presidente Lugo de lo ocurrido, para destituirlo sólo una semana después. El ataque
Viernes 15 de Junio, en una zona rural de las más afectadas por el agronegocio dentro del distrito de Curuguaty, un violento desalojo en una tierra del Estado de la cual esgrime supuesta "propiedad" uno de los terratenientes más importantes del Paraguay, Blas Riquelme, dio como resultado la muerte de once campesinos y seis policías.
En uno de los diarios de tirada más grande del país, ABC color, se pudo leer en los días siguientes a la masacre cómo se tildó a los campesinos de "invasores" y se santificó a los policías muertos. También se habló de "supuestos campesinos", como si estos no fueran tales, y además se los asoció con otros episodios de violencia, entrenamiento militar y armamentismo. El nombramiento por parte de Lugo de un nuevo comandante de las fuerzas policiales, involucrado como responsable del operativo en Curuguaty, aparece recurrentemente en todas las crónicas como aditamento sobre la responsabilidad del primer mandatario en los hechos.
Así como un 80% de las tierras de Paraguay se concentran en un 2% de los propietarios, la desigualdad económica también se replica en la propiedad del espectro radioeléctrico: un 98% se encuentra en manos de medios comerciales y sólo un 2% se reserva para medios públicos. Si indagamos un poco de cerca los nombres que figuran como accionarios dentro de ese 98%, podremos ver las conexiones entre el poder político heredado de la dictadura de Alfredo Stroessner, los grandes terratenientes paraguayos y los medios de comunicación.
El diario ABC, fundado durante la dictadura de Stroessner por Aldo Zuccolillo -quien también es, actualmente, presidente de la Sociedad Interamericana de Prensa-, es parte del Grupo Zuccolillo, socio de Cargill Paraguay, una de las transnacionales más importantes del agronegocio en el mundo. No es casualidad, entonces, esta fuerte arremetida del medio de comunicación en contra del gobierno, ya que sólo un par de semanas antes un organismo estatal -el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Vegetal- había prohibido la introducción de una semilla Monsanto al país. La liberalización de estas semillas traería un enorme beneficio económico a ese 2% de propietarios que concentran la tierra.
Los diarios comerciales que le siguen en importancia (y ventas) a ABC son Última Hora y La Nación. El primero pertenece al grupo empresario que lidera Antonio Vierici. Este grupo ostenta además el canal de TV Telefuturo, una cadena de supermercados y la licencia de Burger King en Paraguay, entre otras empresas. El Grupo Clarín de Argentina posee, desde 2007, el 40% de las acciones de Última Hora y actúa en el país con diversos canales de televisión, la empresa de cable Cablevisión, Fibertel y los derechos de transmisión del fútbol. La Nación, por su parte, es propiedad del político Osvaldo Domínguez Dibb, miembro del Partido Colorado. El grupo Dibb tiene además en su poder el diario Crónica, varias radios y la tabacalera Boquern.
Una vez puesto en marcha el juicio político, estos medios de comunicación mantuvieron un rol fundamental en la construcción del consenso: la medida se presentó como un procedimiento legal y legítimo que pone en camino de reconstituir el orden social en Paraguay. Desde el exterior se vieron acompañados por sus socios, que ya han mostrado su rol en otros países -apoyando el golpe en Venezuela (2002), en Honduras (2009) y en Ecuador (2010)-. En la mayoría de los casos se ha hablado de “destitución”, resaltando la legalidad del proceso. Así como también se ha hecho hincapié en cómo las cosas “han vuelto a la normalidad” luego de la manifestación del viernes 22 de junio.
La defensa
La televisión pública paraguaya, inaugurada recién en mayo del 2011 como uno de los canales más modernos de Paraguay, fue junto con los medios alternativos una trinchera de la resistencia desde el día del juicio político a esta parte. Los manifestantes antigolpistas encontraron a partir del “micrófono abierto” la posibilidad de expresarse y manifestarse, y durante los días siguientes al golpe se reunieron de forma masiva en la puerta del canal. Sin embargo, los medios comerciales no mostraron estas imágenes y se detuvieron sólo en aquellas manifestaciones a favor de la asunción de Franco.
La respuesta oficial a este esbozo de participación popular no tardó en hacerse oir: en estas horas se están empezando a denunciar los primeros intentos de censura y de intervención por parte del nuevo gobierno en el canal público. Aún cuando el micrófono ha estado abierto también a personas que defienden el gobierno de Franco.
Por otra parte, a nivel internacional los medios de comunicación públicos de varios países realizaron una cobertura en defensa de la democracia paraguaya y denunciando el golpe. Tal es el caso de Venezolana de Televisión (Venezuela), Televisión Pública Canal 7 (Argentina) y la cadena latinoamericana de noticias Telesur.
El porvenir
Es en los momentos de mayor confrontación política donde los medios de comunicación muestran "la hilacha", como sucedió en 2008 en la confrontación "entre el campo y el gobierno" en Argentina.
Sin embargo, la deconstrucción de la hegemonía de estos medios de comunicación no depende únicamente de analizar sus conexiones con el poder político y económico. La construcción de una fuerza social y política popular que pueda dar la disputa en la resistencia por la defensa de la democracia tiene que ir indefectiblemente de la mano de la construcción de nuevos medios de comunicación, que tengan otra estructura interna, fuera de las lógicas comerciales, pero con capacidad de disputar y generar un discurso antagónico al que quieren imponer “los de arriba”.
Es interesante analizar el proceso que se vaya a dar con la televisión pública: si la participación popular antigolpista efectivamente logra aglutinarse en ese espacio en el corto y mediano plazo, esta puede potenciarse y multiplicarse en todo el país.
La perspectiva a largo plazo tiene más que ver con el devenir político de Paraguay en general, pero sin dudas la lucha por la democratización del espectro radioeléctrico tiene que ser una de las disputas fundamentales del pueblo paraguayo si efectivamente se propone la pelea por la democracia.
Nota publicada originalmente en www.marcha.org.ar.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso de las autoras mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

Afganistán, Irak, Centroamérica: el nuevo campo de batalla de EEUU



Afganistán, Irak, Centroamérica: el nuevo campo de batalla de EEUU
El Puercoespín
En la madrugada del 11 de mayo, un comando conjunto de la DEA (la fuerza antidrogas norteamericana) y la policía local provocó un desastre en la Costa de Mosquitos hondureña.
Los agentes perseguían en helicóptero a una lancha supuestamente tripulada por narcotraficantes que llevaban un cargamento de cocaína. El cargamento había llegado desde Venezuela en avión y desde Honduras sería transportado por agua hacia los Estados Unidos, según la versión oficial. Pero los agentes, en lugar de apuntar a la lancha que se desplazaba en la oscuridad entre la selva, abrieron fuego contra otra lancha, iluminada y llena de pasajeros. Los disparos mataron a Juana Jackson Ambrosio (28), Candelaria Pratt Nelson (48) –ambas embarazadas– y a Wilmer Lucas Walter (14) y Enerson Martínez Henriquez (21). Luego, los agentes bajaron en un pueblo cercano, golpearon puertas, esposaron gente y cuestionaron a todos sobre dónde estaban los narcos.
Cuando salió el sol, ardieron cuatro casas en el pueblo de Ahuas (6.000 habitantes). El resplandor sorprendió a los líderes locales. ¿La policía quemaba las casas? No, se supo pronto: eran los mismos vecinos, que castigaban a aquellos que trabajaban para los narcos. “La droga nos pone a todos en peligro. La gente se quiere librar de este problema”, explicó Sinicio Ordoñez, presidente del Consejo de Ancianos de la comunidad indígena local.
La matanza llamó la atención sobre algo que la mayoría no sabía: la renovada intervención norteamericana en Centroamérica, esta vez no para luchar contra el enemigo comunista sino contra el narcotráfico, que en los últimos años se ha instalado allí de la mano de la violencia de pandillas, la corrupción policial (Honduras, el país más violento del mundo medido en cantidad de muertes violentas por habitantes, tiene una de las policías más corruptas del mundo) y el estallido de México. Los comandos de la DEA (los llaman FAST: Foreign-deployed Advisory Support Team, o equipo de apoyo desplegado en el extranjero) fueron creados en 2005 en la guerra de Afganistán para combatir a los traficantes de drogas que financiaban a los Talibán; también fueron empleados en Irak. Ahora han sido desplegados para una nueva guerra, esta vez en Centroamérica.
La administración Obama ha vuelto a aplicar la vieja política de los Estados Unidos, el prohibicionismo imperial, que incluye las incursiones militares y el entrenamiento de fuerzas locales que acaban cometiendo diversas tropelías. Como sugiere el New York Times: “…las oscuras circunstancias que rodean a los tiroteos (en Honduras) subrayan los éxitos y riesgos potenciales en que los Estados Unidos aumenten los esfuezos para ayudar a los pequeños gobiernos de América Central a batallar a contrabandistas de narcóticos bien armados y financiados, adaptando técnicas contrainsurgentes desarrolladas en las guerras de Irak y Afganistán”.
Esas políticas han fracasado estruendosamente en México, donde han obtenido un resultado exactamente inverso al buscado: el entrenamiento de fuerzas especiales propició la creación de los Zetas; la declaración de guerra total llevó a una violencia igualmente total por parte de los carteles; y la actividad de estos sigue siendo financiada con dinero, en su mayoría, de los consumidores de drogas norteamericanos y armada por los arsenales de venta libre en los Estados Unidos. (vean este artículo)
En la misma Honduras en que la DEA ensaya sus aventuras, el gobierno ha renunciado hace tiempo a la posibilidad de enfrentar al narcotráfico. Su razonamiento es sencillo y tal vez compartido por algunos de los votantes de México: como carecen de poder para enfrentar a ese poder criminal trasnacional y su propia policía es una de las peores del planeta, sólo queda esperar que gane el candidato el PRI y negocie con los carteles la reducción de la violencia. Mientras tanto, en la misma Centroamérica ha surgido una nueva nueva política, que va el sentido contrario. En El Salvador, el gobierno ha acordado una tregua con las pandillas que ha bajado el número de muertes en un espectacular 58 por ciento. Aunque el gobierno salvadoreño niega oficialmente haber patrocinado el acuerdo, que atribuye a las pandillas mismas, otros países, como Guatemala, estudian seguir el mismo camino y hasta la OEA se ha interesado. Esta idea no ha surgido de la nada. Como nunca antes, la idea de despenalizar el consumo de, o legalizar lisa y llanamente, las drogas prohibidas corre por el continente con nueva fuerza y en boca de voceros antes improbables. En, por ejemplo, el propio presidente Otto Pérez Molina, ex militar, involucrado en las matanzas de la cruenta guerra civil, que ha propuesto la legalización a la vista del fracaso de la guerra.
Es una idea que está prendiendo también, inesperadamente, en América del Sur. Hace unos días, la Corte Constitucional de Colombia despenalizó el consumo y tenencia personal de marihuana y cocaína . Pero, sobre todo, una semana antes, el gobierno de Uruguay dio el mayor golpe al enviar al Congreso un proyecto de ley para legalizar la marihuana. Es el mismo presidente José Mújica el que propone, para combatir la inseguridad y el tráfico, que el propio Estado regule la fabricación y distribución de marihuana.
¿Cuál de las dos políticas primará en el continente? Esta es una de las tantas cuestiones sobre las que incidirán, también, las elecciones de mañana [hoy] en México.
Fuente: http://www.elpuercoespin.com.ar/2012/06/30/afganistan-irak-centroamerica-el-nuevo-campo-de-batalla-de-eeuu-por-graciela-mochkofsky/

Rio Tinto Alcán y el Golpe de Estado en Paraguay (tercera parte)

Rio Tinto Alcán y el Golpe de Estado en Paraguay (tercera parte)

Río Tinto Alcán (RTA) es una multinacional canadiense, que se dedica a la industria electrointensiva de producción de aluminio y a la minería extractiva, con presencia en los cinco continentes. Al inicio del Gobierno de Fernando Lugo, presentó una oferta de instalar una industria electrointensiva de aluminio, con una inversión inicial de 2.500 millones de US$ que posteriormente aumentó a 3.500 o 4.000 millones de US$, dependiendo de la fuente consultada. ¿Porqué Paraguay?
Paraguay no tiene la materia prima (bauxita) ni los demás insumos para la producción del aluminio. Es un país sin litoral marino y con una escasa población.
Según las expresiones de sus propios representantes, principal atracción de Paraguay fue su “energía abundante y barata”. Entonces, explicaron que deseaban un contrato a largo plazo, similar al que tenían en otros países, de 50 años, con una tarifa fija o ajustable de acuerdo al precio del aluminio. Posteriormente bajaron el plazo a 30 años, renovable por 20 más.
La tarifa eléctrica
Explicaron que el rango de precios de la energía para que su inversión ofrezca el retorno necesario para establecerse en Paraguay, no debía superar los 38 US$//MWh, lo cual fue corroborado posteriormente con un estudio que realizó el gobierno de Paraguay a través de la Consultora británica CRU Estrategie.
Estos precios, son similares a los que defendieron los lobistas de RTA, como Diego Zavala - Coordinador Técnico del Equipo Técnico Interinstitucional, hasta su nombramiento como Viceministro de Comercio por el nuevo presidente Federico Franco- y Francisco Rivas -Ministro de Industria y Comercio de Fernando Lugo y único ministro confirmado por el actual gobierno.
Poco antes del golpe, Francisco Rivas defendía que el precio debía ser del 42 US$/MWh, intermedio entre los 32 US$/MWh planteados por RTA y los 60 US$/MWh establecidos por el Viceministerio de Minas y Energía.
Diego Zavala y Francisco Rivas han dicho que el Estado Paraguayo no subsidiará a RTA. Sin embargo, las tarifas que ellos proponen significan un subsidio millonario. Resulta, que de acuerdo a los expertos en la materia, una industria como RTA consume energía las 24 hs del día, en forma continua. Ese tipo de energía, se llama “energía garantizada” cuando proviene de una hidroeléctrica y tiene un 95% de confiabilidad.
Todos los estudios indican que RTA se proveerá de Itaipú Binacional, central hidroeléctrica compartida en partes iguales por Brasil y Paraguay. Paraguay en la actualidad consume aproximadamente un 15% del total, y el excedente lo cede a Brasil a cambio de una compensación.
Según los cálculos estadísticos de las condiciones hidrológicas, este tipo de energía garantizada se produce en Itaipú, 75.150 GWh al año para 12.135 MW de potencia disponible. Ello equivale a 6.163 horas al año, es decir, dividido 12 meses, 516 horas al mes. El costo de la energía garantizada se calcula, tomando la tarifa de la potencia, de 22,6 US$/kWh y dividiéndola por la cantidad de horas al mes que existe energía garantizada, lo que da 43,8 US$/MWh.
A este costo, los técnicos agregan la compensación por cesión de energía que Brasil paga, pues será un ingreso que el Estado perderá, de 8,4 US$/MWh. Entonces, el costo de la energía en Itaipú, para vender a RTA al mismo precio que se vende al Brasil, es de 52,2 US$/MWh.
Por último, como la energía debe ser transportada por redes de transmisión hasta la fábrica, se deben agregar los costos de transmisión y pérdidas, de 7,5 US$/MWh, con lo cual la tarifa final, a los costos de oportunidad actual son de 59,7 US$/MWh.
Vemos entonces, que para la última tarifa planteada por Francisco Rivas, y considerando que RTA consumirá 1.100 MW de potencia y 9.600 GWh de energía por año, el subsidio, multiplicando esa energía por la diferencia entre 59,7 y 42 US$/MWh, da 165 millones de US$ al año.
Ni Diego Zavala ni Francisco Rivas han explicado cómo se cubrirá esa diferencia.
Debe añadirse, que estos costos son crecientes considerando el aumento de los precios internacionales de la energía y el agotamiento de las fuentes de energías baratas. Considerando esos costos crecientes, los técnicos paraguayos calculan que en 20 años, el Estado habrá subsidiado 12 mil millones de dólares a RTA.
Industrias asociadas
En compensación al bajo precio por la energía que solicita RTA, las ventajas que ofrecen es que, ayudarán a la industrialización de Paraguay y a la generación de empleo, y que Paraguay tendrá una mayor soberanía sobre su energía pues la energía se utilizará localmente, en vez de exportarse como sucede en la actualidad.
Sin embargo, en su informe, la consultora CRU Estrategie, afirma que no existe antecedente en el mundo donde las industrias procesadoras en el mundo se instalen cerca de las lingoteras (como será la electrointensiva de aluminio). Las industrias procesadoras siempre se instalan cerca de los mercados de consumo del aluminio. Paraguay no tiene vocación de mercado de consumo, con su población de apenas 6,2 millones de habitantes, si tan solo la comparamos con Brasil (190 millones) o Argentina (40 millones).
Empleo
En cuanto a la mano de obra, según RTA generarán 1.250 empleos directos y diferentes cifras de empleos indirectos (han dicho 10.000, 15.000 y ultimamente 50.000). Como consumirá 1/5 parte de toda la energía de Paraguay, si la comparamos con su industria tradicional, que consume 1/30 parte de toda la energía de Paraguay y emplea en forma permanente a 300 mil trabajadores, aún comparando con los 50.000 empleos indirectos, la industria tradicional paraguaya genera 36 veces más empleo que RTA. Si comparamos los empleos directos, la relación es uno a mil cuatrocientos.
Impuestos
RTA ha afirmado que desea acogerse a las leyes de fomento de la inversión del Paraguay y la ley de la Maquila. Es lógico que así sea, según lo cual, la expectativa de cobro de impuestos sería entre 96 y 28 millones de US$ por año, para una facturación esperada, a un precio del aluminio de 2.000 US$/kg, de 1,3 mil millones de US$ por año (entre 7 y 2% de impuestos sobre facturación).

Condiciones de RTA
RTA requiere de parte del Estado inversiones en infraestructura de obras públicas (puentes, caminos, ferrocarriles, líneas de transmisión), cuyo valor se calculó en 700 a 1.000 millones de US$. La inversión de 3.500 millones de dólares de RTA, sería en de tecnología de punta, donde la mayor parte del capital -los equipos y maquinarias- serían importados.
Resumen
Si el actual gobierno acepta las condiciones de RTA, deberá enfrentar la construcción de obras públicas por valor de 700 a 1000 millones de US$, más un subsidio anual creciente de 165 millones de US$ que llegará a 12 mil millones de US$ en 20 años. El nuevo presidente de la ANDE (Administración Nacional de Electricidad) ya ha afirmado que ellos no podrán soportar dicho subsidio.
A cambio, RTA empleará en forma directa a 1.250 personas (1400 veces menos que la industria tradicional) y pagará entre un 2 a 7% de impuestos sobre la facturación.
Conclusiones
Hemos leído las últimas declaraciones de las nuevas autoridades del gobierno de Paraguay, reconocido por muy pocos países, entre ellos Canadá, El Vaticano y Alemania. En ellas aseguran que acelerarán el proceso de negociación con RTA.
Sin duda, el cambio de gobierno ha sido un enorme golpe de suerte para la transnacional canadiense.
Corolario
El cambio de gobierno de Paraguay no ha pasado de ninguna forma indiferente a la población. Cada día, se realizan movilizaciones multitudinarias de repudio al golpe parlamentario. También la opinión pública ha expresado, a través de las redes sociales, su inquietud en relación a la acelerada negociación con RTA. ¿Tendrá validez un acuerdo así entre el cuestionado gobierno y RTA?
La ciudadanía paraguaya lo dirá.
Fuentes consultadas:
http://www.ssme.gov.py/vmme/pdf/riotinto/IIAudiencia/audiencia-5.pdf
http://www.abc.com.py/edicion-impresa/opinion/rio-tinto-una-cuestion-de---numeros-y-no-de-ideologias-410674.html
http://www.ssme.gov.py/vmme/pdf/riotinto/ministroperezbordon.pdf
http://www.ultimahora.com/notas/540775-Proyecto-de-Rio-Tinto-cobra-nuevo-impulso-con-el-Gobierno-de-Franco
http://www.lanacion.com.py/articulo/78252-se-descarta-subsidio-a-favor-de-rio-tinto.html
Silvio Nuñez es Investigador
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

Franco: “Dios y el destino quise…”



Honduguay
Franco: “Dios y el destino quise…
Roberto Quesada
"El pueblo no renuncia nunca a sus libertades sino bajo el engaño de una ilusión." Edmund Burke.

Otro junio, otro golpe de Estado en América Latina, mejorado pero no perfeccionado o quizá sea perfecto y lo que realmente haya cambiado es la gente, los pueblos, la manera de ver las cosas, han aprendido a no dejarse engañar por lo que aparentemente se ve, lo que ves no es, es así como la “magia” no les está funcionado del todo bien a los golpistas del Paraguay, un montaje realizado por una sucursal marginal de Hollywood: se les derritió el maquillaje antes de la puesta de sol.
Honduras y Paraguay, unidas por el golpe: Honduguay. Y tal como ya lo habíamos prevenido en entrevista que publicara Telesur, que nos hiciera el periodista chileno Mario Casasús, el 9 de julio del 2009: “El golpe de Estado en Honduras puede ser un laboratorio contra los países que estén pensando mucho en sus libertades”. Y no nos equivocamos, el golpismo retorna con otra careta, redecora el teatro pero no cambia personajes y ahora en Paraguay, al igual que en Honduras, tratan de bajar el telón pero el telón se niega a caer. Ya no cree la gente en las conspiraciones políticas en alianza con la desinformación mediática. Aunque rebuznen (nada nuevo en ellos) los diputados/as paraguayos, al igual que en su momento lo hicieran los hondureños/as.
Así mismo pretenden exportar lo que se conoce como “La primavera árabe”, a lo que quizá pudiese llamársele “El verano latino”, allí está el gobierno de Bolivia en el calvario de policías alzados en armas, que lo que menos quieren es negociar sino llevar el país al caos y otra manera de justificar otro golpe de Estado efecto carambola, a manera de que influya, mercenarios incluidos, en otros países y así crear el infierno latino y dar en el traste a todas las conquistas populares en América Latina.
En este teatro de la muerte de muchos y diversión de pocos, aparece la estrella, el presidente de facto Federico Franco, tratando de decirle al mundo y convencerse a sí mismo, que todo ha sucedió dentro de la normalidad, que no hay tal golpe, pero con la torpeza de actor novato, en su primera entrevista en un medio internacional, CNN, de entrada resbala cuando dice: “Dios y el destino “quise”… ujuu, perdón, quiso que ocupara este lugar”. Presidentío de facto, eso se llama lapsus linguae, y es cuando el interlocutor dice una cosa pero en el fondo piensa otra, la verdadera: allí mismo se delata “quise”, es cierto, desde siempre quiso ocupar el lugar del presidente constitucional Fernando Lugo, y no se ha detenido en hacer zancadillas una y otra vez que son del dominio público.
Y he aquí como define Freud ese autoreconocimiento de golpista hecho por Francisco Franco en CNN, el “flamante” presidente de facto de Paraguay: “La explicación dada por Freud (y por el psicoanálisis en general) radica en el afloramiento de lo reprimido (generalmente producido en momentos de estrés, ansiedad, angustia, o déficits de atención) cuando se relajan las represiones conscientes.
En muchos casos lo reprimido es del orden de la mentira, en otros es principalmente un deseo (sea consciente o sea inconsciente) reprimido en el inconsciente por imperativos morales (en este caso ha sido el superyó el factor que ha mantenido reprimido al deseo en lo inconsciente). Sin embargo la represión continuada, si el deseo reprimido posee la suficiente intensidad, se relaja en algún momento por fatiga y es entonces cuando ocurre el lapsus”.
Pero el mentiroso compulsivo, aun cercado por una banda presidencial y un bastón de mando que no le pertenece, no deja de serlo. Así es como Federico Franco, en la entrevista que le hizo Fernando del Rincón, sin el menor pudor aseguró que su mandato era real porque “obtuve más de 80 votos a favor y apenas uno en contra”. Si fuera de mi pueblo, de Olanchito, le pondrían de apodo: Mentira Franco. Vimos la transmisión completa por Telesur, y de 45 diputados, hubo dos ausentes (entre ellos Stroessner) , 39 a favor y 4 dignamente en contra, porque protestaron e incluso denunciaron que no los dejaron hablar cuando ese era su derecho.
Como también vimos la transmisión del Congrezoo (para quienes me leen en el exterior, así se le llama al congreso en Honduras, y no sin razón y con el perdón de la fauna), las “deliberaciones” del Paraguay fueron un calco del de Honduras. La variante del guión solo fue guardar el ejército y evitar lo que Mario Vargas Llosa tilda como: “Un golpe militar de una gran torpeza”, no sacando a punta de fusiles al presidente constitucional Fernando Lugo como se hizo con el presidente constitucional Manuel Zelaya Rosales. Y también que, por ahora (y por lo que sabemos), no hay muertos, pero si se intensifica la protesta popular, no es de dudar que irán asesinando a la oposición tal como se ha hecho en Honduras desde aquel fatídico día que hoy 28 de junio, precisamente, cumple tres años. Pero no en paz, la Resistencia no ha parado desde entonces un solo minuto.
Y siguiendo el guión mejorado, los golpistas paraguayos cortaron el UNICI, de la TV Pública de Paraguay, único medio que le quedaba al pueblo para escuchar la verdad. Y dicen que no son golpistas con tremenda violación a la libertad de expresión y con la represión ejecutada el día del golpe de Estado Parlamentario… Por supuesto, como está controlada la información, hasta después sabremos sobre persecución y tortura, después de todo es una policía y ejercito con experiencia, con los 35 años que estuvo en el poder el tristemente célebre dictador Alfredo Stroessner… Desgraciadamente la OEA es un organismo decorativo, por eso José Insulza pide que se resignen a que el Franco presidente de facto, pase nueve meses de soledad y no precisamente en el vientre materno.
Esto le sirve al de facto de Paraguay Federico o Francisco Franco (creo que estoy sufriendo un lapsus linguae pero para los fines, no hay ninguna diferencia), pues podrá seguir mintiendo sin ningún ápice de vergüenza, magia que solo puede hacerla alguien con toda una vida de experiencia en ese oficio. Pero, afortunadamente, como dice un refrán muy latinoamericano: “Al mal circo, le crecen los enanos”.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

El espejo paraguayo

El espejo paraguayo
Raúl Zibechi
 
Un golpe de Estado es una acción desde arriba para interrumpir un proceso político. No importa quién la realice ni los métodos que utilice. Los golpes al estilo del que derrocó a Salvador Allende cayeron en desuso, por el alto costo internacional que tienen. El golpe de Estado que apartó a Fernando Lugo de la presidencia de Paraguay se inscribe dentro de la nueva modalidad inaugurada con el derrocamiento de Manuel Zelaya en Honduras, en junio de 2009, por la Suprema Corte de Justicia. Es un nuevo tipo de golpe que comenzó a implementarse luego del estrepitoso fracaso del golpe al viejo estilo contra Hugo Chávez el 12 de abril de 2002. Cuando los sectores populares aprendieron a desbaratar el golpe clásico, aparece esta nueva modalidad de golpe institucional.
En los últimos 20 años los únicos golpes exitosos al viejo estilo sucedieron en Haití: en 1991 el general Raoul Cedrás derrocó a Jean Bertrand Aristide, y en 2004 sucedió algo similar, pero con la participación de tropas de Canadá, Francia y Estados Unidos. En 13 de los 15 casos en los que un presidente latinoamericano no pudo terminar su mandato fue porque la presión popular forzó la dimisión.
Lo destacable es que el método de la destitución por organismos del Estado es idéntico en los casos en que se hace a favor y en contra de los sectores populares. En Ecuador, Abdalá Bucaram y Lucio Gutiérrez fueron destituidos por el Congreso en medio de levantamientos populares. Por eso no sirve focalizarse en las formas, sino en los procesos. El nuevo golpismo puede repetirse en cualquier país de la región, ya que las clases dominantes retomaron su ofensiva y se ponen al servicio de un Pentágono deseoso de desestabilizar.
La caída de Lugo, como toda crisis política, desnuda los cambios que se están produciendo en la región desde que Barack Obama definiera la Nueva Estrategia de Defensa.
En primer lugar, la masacre de Curuguaty y el golpe contra Lugo fueron posibles por la alianza entre el agronegocio, los terratenientes propietarios de tierras malhabidas durante la dictadura de Stroessner, las mafias del contrabando y el narcotráfico, con sus ramificaciones en los medios de comunicación, el Estado y las iglesias. La gira regional del secretario del Pentágono, Leon Panetta, en abril pasado, parece haber sido una señal que activó a las derechas (La Jornada, 18/5/12).
El Pentágono tiene una larga experiencia en la aplicación de la “doctrina del shock”, que pasa por la destrucción de naciones enteras para reconstruirlas al servicio del capital y de la potencia hegemónica. La decadencia de Estados Unidos hace que la única estrategia viable sea la dominación sin hegemonía, que sólo necesita la fuerza militar; por eso la nueva estrategia instala la violencia golpista en el centro del escenario político.
En segundo lugar, el modelo económico extractivo, asentado en la minería a cielo abierto, los monocultivos y las megaobras de infraestructura, fortalece a las clases dominantes y al imperio, debilita a los sectores populares, pone en riesgo a los movimientos y las libertades democráticas.
Los gobiernos que han optado por profundizar este modelo se están enajenando el apoyo popular y, a la vez, están dando vida a sus propios sepultureros, como sucedió en Paraguay, donde el crecimiento exponencial de los cultivos de soya no hizo más que fortalecer a los usurpadores de tierras y a los asesinos de campesinos.
En tercer lugar, el movimiento campesino de Paraguay recorrió en medio siglo un camino del que algo podemos aprender para enfrentar el nuevo escenario. En la década de 1960 se crearon las Ligas Agrarias, impulsadas por las comunidades eclesiales, un impresionante movimiento de base que cambió la historia de los de abajo. A mediados de la década de 1970 fueron salvajemente reprimidas por el régimen de Stroessner. En 1980, sobre sus cenizas se crea el Movimiento Campesino Paraguayo. Hasta aquí la trayectoria habitual bajo dictaduras: organización-represión-reagrupamiento.
En la década de 1990, en democracia, el movimiento crece y gana visibilidad, pero se fragmenta. Aun así, la lucha por la tierra se intensifica y el movimiento irrumpe en la crisis política de 1999 por el asesinato del vicepresidente Luis María Argaña, creando un hecho político trascendente como el marzo paraguayo, que provocó la primera derrota de los herederos demócratas de la dictadura. El golpista Lino Oviedo huye a Argentina y el vicepresidente Raúl Cubas se asila en Brasil.
En 2002 la unidad de acción de todo el sector campesino-popular en el Congreso Democrático del Pueblo, donde confluyeron 60 organizaciones, impidió la privatización de empresas estatales y frenó la aprobación de una ley antiterrorista. Pese a las divisiones los movimientos fueron capaces de volver ingobernable la democracia de baja intensidad y derrotar el modelo neoliberal.
Ese escenario creado desde abajo tapizó el camino de Lugo a la presidencia en 2008. Los movimientos más importantes –no todos– optaron por crear partidos, o sea institutos del Estado financiados por el presupuesto, según el feliz aserto de Adolfo Gilly (La Jornada, 27/6/12). Se profundizaron la división y la atomización. Después de 2008 una parte de los mejores dirigentes se convirtieron en funcionarios y se instalaron en la capital, convencidos de que es el camino para adquirir más fuerza. Hoy, salvo excepciones, los movimientos sufren su mayor debilidad en décadas.
Medio siglo de movimiento campesino, el principal movimiento antisistémico del Paraguay, muestra que no hay atajos que puedan sustituir el conflicto de clases. Que la presión internacional por sí sola no puede modificar la relación de fuerzas. Que hay varios tipos de derrotas. Que la derrota por represión no es tan destructiva como la institucionalización. Que sólo podemos frenar la ofensiva del capital y del imperio en calles y plazas, y que lo demás es un espejismo, necesario para sobrevivir, dicen algunos, pero espejismo al fin.
Fuente: http://www.jornada.unam.mx/2012/06/29/index.php?section=opinion&article=021a1pol

viernes, 29 de junio de 2012

"Creo que el itinerario de Honduras se repetirá en Paraguay"



Entrevista a Fernando Lugo, depuesto presidente de Paraguay
"Creo que el itinerario de Honduras se repetirá en Paraguay"
Marko Álvarez y Cristian Kovadloff
AP
El destituido presidente paraguayo Fernando Lugo cree que la OEA no lo repondrá en el cargo, tal como ocurrió en 2009 con Manuel Zelaya en Honduras, según dijo el miércoles en una entrevista con The Associated Press.
"Creo que el itinerario de Honduras se repetirá en Paraguay y con el tiempo espero que estos organismos internacionales pudiesen tener la madurez y el coraje como para decir que aquí hay una ruptura del proceso democrático y merece una sanción", señaló, mientras hablaba sin alterarse en la sede del socialista partido País Solidario, en donde lidera un movimiento denominado Paraguay Resiste.
El ex obispo católico de 61 años y enfermo de cáncer linfático fue destituido el viernes por el Senado en un cuestionado juicio político por mal desempeño en sus funciones. El hasta entonces vicepresidente, Federico Franco, concluirá el período de cinco años hasta agosto del 2013.
En Honduras, el presidente constitucional Manuel Zelaya gobernó desde 2006 hasta el 28 de junio de 2009, cuando un golpe de estado lo derrocó y expulsó a Costa Rica. Roberto Micheletti asumió el poder como mandatario de facto.
El país centroamericano fue suspendido como miembro de la Organización de Estados Americanos (OEA) después de que Micheletti rechazó el ultimátum del organismo para que abandonara el mando y se restableciera el anterior gobierno.
Tras las elecciones presidenciales hondureñas del 29 de noviembre de 2009, la OEA no reconoció el gobierno de Porfirio Lobo, ganador de los comicios. La situación sólo se resolvió hasta mayo de 2011, cuando Lobo firmó en Cartagena, Colombia, un "acuerdo de reconciliación nacional" que supuso el reingreso de Honduras en la OEA y el regreso de Zelaya al país.
Más allá de las diferencias, Lugo se refirió el miércoles al caso de Honduras como un "laboratorio" de lo que ocurrió en Paraguay.
"Estoy de acuerdo en la misión de investigación y de análisis que la OEA hará para luego con serenidad tomar una determinación. Espero a la gente de la OEA para comprobar que aquí hubo un quiebre democrático mediante un golpe parlamentario", dijo Lugo.
El martes, el secretario general de la OEA José Miguel Insulza anunció en Washington que planea visitar personalmente o enviar representantes a Paraguay para recabar información detallada de primera mano sobre la celeridad del juicio político que culminó con la destitución.
Algunos países miembros de la Unión de Naciones Suramericanas mostraron una marcada resistencia a que la OEA adopte una posición antes de la cumbre presidencial del Mercosur y de la Unasur que se celebrará el viernes en la ciudad argentina de Mendoza.
"Estos procesos de hoy de integración regional no se pueden desconocer. Lo que dice Mercosur no se puede desconocer. Lo que diga mañana la reunión de Unasur no se puede desconocer. Por eso decía que muy prudentemente la OEA de alguna manera quiere escucharle a Mercosur, a Unasur, y seguramente después se sumarán a esas resoluciones regionales", manifestó Lugo.
Varios observadores apuntan que en años recientes la OEA ha perdido influencia en Sudamérica, en momentos en que varios mandatarios quieren impulsar a la Unasur como un foro para resolver las crisis de la región.
La misión de la OEA permitirá a Insulza presentar la semana próxima un informe sobre Paraguay ante el Consejo Permanente.
Lugo reafirmó en la entrevista con AP que no está de acuerdo con alguna sanción de carácter económico para el Paraguay "porque representaría (algo) perjudicial pero los organismos regionales como Mercosur y Unasur tendrán la libertad de lo que quieran, pero me reuní con pequeños productores, exportadores de mandioca (yuca), banana y piñas (ananas) y se mostraron preocupados por un eventual bloqueo".
Criticó a algunos medios de prensa de su país, sin dar nombres, porque supuestamente "están diciendo que aquí no ha pasado nada, que todo sigue normal. Sin embargo, se ha roto el proceso democrático". Agregó que el Senado "sin argumento de peso se ha sacado a un presidente electo por la voluntad popular en el 2008".
Finalmente, reiteró que "estoy viendo mi candidatura a algún cargo electivo porque como no tengo el rango de senador vitalicio, estoy habilitado pero por el Frente Guasú (coalición de izquierda), que no hará alianza con los partidos golpistas".
Explicó que de haber terminado su período presidencial, habría adquirido el estatus de senador vitalicio y eso le habría cerrado las puertas a participar en elecciones.
El ex clérigo estuvo en el poder tres años, 10 meses y siete días.
El factor tierra en la actual crisis paraguaya
Leonidas Wiener Ramos
Servindi
El violento desalojo de la Hacienda Curuguaty en el noroeste de Paraguay, en el cual murieron 11 campesinos y 6 policías, y que sirvió de justificación al juicio político y destitución del Presidente Fernando Lugo, representa un nuevo episodio del histórico y dramático problema paraguayo en torno al acceso a la tierra.
El despojo de la tierra en Paraguay es de larga data, adoptando muchas caras y medios para legitimarse en el tiempo, pero siempre tendiendo hacia su concentración en pocas manos y en perjuicio del poblador rural. Primero, mediante el régimen de encomiendas colonial. Luego, a través de políticas implementadas por gobiernos republicanos de fines del siglo XIX, que favorecieron la concentración de tierras por el capital privado extranjero.
Para ello se inventaron artilugios legales como la “Ley de Venta de Tierras Públicas” en el gobierno de Bernardino Caballero, que obligaba a los campesinos paraguayos a vender sus tierras si no contaban con un título de propiedad, cuando los gobiernos anteriores a la Guerra de la Triple Alianza (1864 – 1870) habían dado en usufructo las tierras a estos mismos campesinos a cambio de trabajarlas.
En la primera parte del siglo XX se impulsaron procesos de reforma agraria que no se cumplieron a cabalidad, debido a la presión de los sectores más poderosos del país, ligados directamente a los intereses de los terratenientes. Posteriormente, durante la larga dictadura de Stroessner, la situación se agudizó, pues enormes extensiones de tierra fueron entregados a amigos, políticos, militares y personas allegadas al dictador. A las tierras regaladas por la dictadura se les denomina “tierras mal habidas”, y las investigaciones posteriores han determinado que durante ese período se adjudicaron ilegalmente más de 7 millones de hectáreas.
En los últimos tiempos, nuevos factores vienen influyendo en el problema del acceso a la tierra en Paraguay. Por un lado, la producción extensiva del algodón y, especialmente, la soya, cuya expansión ha tenido un impacto decisivo en el aumento de los precios de los terrenos aptos para la agricultura.
La paulatina inserción de inmigrantes brasileños y especuladores de tierras en estos cultivos extensivos, ha permitido la concentración de tierras frente a un sector rural (casi la mitad de la población paraguaya) al que cada vez le resulta más inalcanzable acceder a la tierra para la producción de alimentos básicos y para abastecer el mercado interno.
Todos estos factores, sumados a las periódicas crisis económicas del Paraguay que aumentan la presión sobre la tierra, han permitido el surgimiento de movimientos reivindicatorios de campesinos “sin tierra” de toda índole, aumentando la conflictividad social de forma dramática en torno a este cada vez más escaso y costoso factor productivo.
Las tomas de tierras efectuadas por los campesinos organizados, han conllevado numerosos enfrentamientos con las fuerzas del orden, generando inseguridad jurídica en la propiedad de la tierra y una profunda desconfianza entre los sectores enfrentados: el campesinado sin tierra y los grandes empresarios agrícolas y ganaderos.
El destituido Presidente Fernando Lugo asumió como suyas las reivindicaciones de los campesinos “sin tierra” durante su campaña electoral. Sus propuestas de gobierno se basaron en la aplicación de una postergada reforma agraria, buscando resolver el problema con la redistribución de la tierra. Esto lo llevó a aliarse con las organizaciones de campesinos “sin tierra”. No obstante, para poder llegar a la presidencia, tuvo que moderar su discurso y situarse en el “centro”, aliándose con el Partido Liberal, segunda fuerza política del país. Cualquier parecido con las últimas elecciones en el Perú (no) es pura coincidencia.
Las concesiones que tuvo que otorgar Lugo a la derecha y a los grupos de poder ligados a los latifundistas, para poder llegar al poder y gobernar hasta el momento en que se produjo el último conflicto, frenaron su programa inicial de reforma agraria. La presión de los movimientos sociales campesinos por acelerar el proceso de reforma, empoderados por una supuesta connivencia con Lugo, impulsaron a un grupo de ellos a tomar la Hacienda Curuguaty, produciéndose el trágico desenlace.
Las consecuencias son ya conocidas: el Partido Liberal rompió su alianza con Lugo, uniéndose al Partido Colorado para defenestrarlo debido a una supuesta “mano blanda” para detener la amenaza social de los campesinos sin tierra. El Partido Colorado es el tradicional partido de la derecha (que gobernó Paraguay durante 61 años, interrumpidos con la asunción de Lugo), cuyos intereses se encuentran ligados con los grandes terratenientes.
Por lo tanto, el problema del acceso a la tierra en Paraguay se recrudecerá en esta nueva etapa, polarizando las posiciones y reduciendo los espacios de diálogo y propuestas que puedan incorporar las necesidades de los campesinos desarraigados.
Resulta inevitable comparar el caso paraguayo con la situación política actual del Perú. El Presidente Ollanta Humala viene perdiendo las bases populares que lo llevaron al poder y que tienen demandas igualmente postergadas. La gran mayoría de estos reclamos tienen como eje, el uso y disposición de las tierras, de los territorios que estas poblaciones habitan y utilizan como medios de vida. Así, la amenaza de la expansión de la soya en Paraguay se traduce en el Perú, como la resistencia a las industrias extractivas por parte de capitales privados.
La desconfianza creciente de un gran sector de la población que se siente engañado por el cambio de rumbo del gobierno de Humala respecto a sus propuestas iniciales, podría configurar un escenario político similar al de Paraguay (recuérdese Bagua). La fragilidad de la bancada de gobierno y la falta de un partido político medianamente organizado que lo respalde, podrían colocar a Humala en una posición bastante vulnerable si los demás grupos políticos conservadores consideran que el Presidente no se encuentra lo suficientemente capacitado para resguardar los intereses ligados al gran capital y la explotación de los recursos naturales.
Por lo tanto, los recientes sucesos en Paraguay deberían constituir un llamado de atención para que el actual gobierno peruano, reencuentre un rumbo de entendimiento con ese sector históricamente postergado que lo votó, reduciendo los espacios a las posturas extremas en ambos lados del espectro político.
Leonidas Wiener Ramos es abogado de la Pontificia Universidad Católica del Perú, especializado en derechos de pueblos indígenas y temas de interculturalidad.
Fuente: http://servindi.org/actualidad/67298

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Paraguay
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Cristiano Morsolin
Sin la presencia de Fernando Lugo, pero con la situación de la democracia paraguaya como tema omnipresente, comenzó ayer la XV Cumbre de Jefes de Estado del Mercosur en la ciudad argentina de Mendoza.
“Quien ha usurpado el poder, Federico Franco, lo hizo a través de un proceso enteramente inconstitucional a través de un golpe parlamentario que tiene bastante semejanza al que dio Adolfo Hitler en la década del ’30, utilizando también el Congreso, manipulando y violando los principios más elementales, en nuestro caso, el de la plena defensa en un juicio y del debido proceso”. La frase corresponde a Ricardo Canese, parlamentario por Paraguay del Mercosur (Parlasur) y secretario general del Frente Guazú, principal fuerza política del país guaraní que apoya al destituido Fernando Lugo. “Se trata de un acto nulo lo que se ha hecho. Creemos que los pueblos, a través de sus gobiernos, deben seguir reconociendo a Lugo como único presidente constitucional de Paraguay y no a quien usurpa el poder en forma ilegítima e ilegal a través de un proceso inconstitucional, como lo hizo Franco”, manifestó Canese que actualmente se encuentra en Mendoza.
¿Cuáles son las razones? Primero nuestro Gobierno declaró a la salud como pública y gratuita. Anteriormente para consultar a un médico del servicio público, las personas más pobres tenían que pagar un arancel, lo mismo que cualquier intervención. A partir de nuestro gobierno todo eso es público y gratuito como debe ser. Ese proceso de adquisición de derechos humanos es un tema que probablemente le molesta a algunos sectores. Por otro lado, en nuestro país hay más de 8 millones de hectáreas de tierras robadas, que nunca han podido ser recuperadas por el Estado. Nuestro gobierno inició gestiones para recuperar esas tierras. El resultado es que nos hacen pagar 100 millones de dólares en costas a los ladrones de tierras” agrega Canese (1).
El parlamentario paraguayo del Parlasur   Ricardo Canese   atiende por teléfono a Otramérica desde Mendoza: “Pedimos al Mercosur que siga reconociendo al Gobierno legítimo y constitucional de Fernando Lugo, y que no reconozca al golpista usurpador Federico Franco. No queremos ningún bloqueo sino que no se reconozca a los golpistas. Se lo decimos también a los gobiernos de América del Sur y del mundo, para que no reconozcan a los ladrones de la democracia y la Constitución, a quienes han perpetrado este crimen contra Paraguay” (2).
El Parlasur en su conjunto rechazó el proceso que terminó con la destitución de Lugo.

Evolución del Golpe

El Observatorio sobre Latinoamérica Selvas ha documentado la evolución de este gravísimo golpe en varios medios internacionales, con entrevistas exclusivas a Mercedes Canese, Vice Ministra saliente de Energía (3) y Immanuel Wallerstein.
El sociólogo estadunidense Immanuel Wallerstein, reconocido a nivel mundial, manifestó que “el escandaloso golpe de Estado en contra del Presidente Lugo de Paraguay debe ser resistido por todas las personas democráticas y progresistas de todo el mundo”. “Los actores cruciales, sin embargo, además de los ciudadanos paraguayos, son los otros estados sudamericanos. Tienen que ser muy firmes con el intento del Senado de Paraguay para deshacer los derechos democráticos en el Paraguay. En esta lucha el mundo respirará mejor y UNASUR se fortalecerá en gran medida”, dijo Wallerstein, principal teórico del análisis de “sistema-mundo” en una nota difundida por varias agencias internacionales entre las cuales Adital (Brasil), Agenpress (Argentina) y EA de Paraguay (4).

Cira Novara, psicóloga – educadora, colaboradora de la Campaña Latinoamericana por el derecho a la Educación CLADE desde Asunción (5) me comenta el pasado domingo 24 de junio de 2012 que “ahora sigue la lucha frente a la TV pública, desde ayer a la tarde, cuando se presentaron los enviados del golpista Franco, para censurar unos programas, se convocó a la gente por las redes sociales y en menos de una hora, la ciudadanía se hizo presente. Niños, niñas, jóvenes, adultos, estuvimos realizando una lucha activa, solidaria, consiente.
Se tomó la TV pública como un símbolo de la democracia, "No se va permitir que los golpistas se apropien del único espacio en que el pueblo puede expresarse".
La gente desde ayer, está expresando su enojo, su ira, sus ideas y sus sueños. Está expresando su sentir: "Dictadura nunca más". La calle está siendo socializada, recuperada, compartida, soñada. Es emotivo encontrarse con los compañeros que lucharon contra la dictadura y con nuestros hijos/as, jóvenes que hoy siguen la lucha. Hoy estamos juntos, codo a codo.
Este golpe nos despertó del letargo. Algunos estaban muy tranquilos, creyendo que esto era ya la democracia, los medios de prensa hacían creer esto, porque ellos seguían lucrando y manejando los hilos de la desinformación. Con la TV pública, la radio nacional, se abrieron espacios para el pueblo, que hoy la ciudadanía la asume y la defiende.
Los golpistas no creyeron que existía un pueblo que pensaba, soñaba y repudia la dictadura. Creyeron que seguía el pueblo sumiso y fácil de manipular.
Ellos en su torre de cristal empañado, no ven y sienten la realidad, solo ven lo que quieren ver y hacen lo que quieren hacer y para ello, utilizan los recursos necesarios que les da el neoliberalismo: asesinato, narcotráfico, censura, robo, empobrecimiento del estado….
Todo cambio viene de una crisis, para que sea verdaderamente revolucionario, este debe ser para nosotros, momento de gran reflexión, ya no podemos aceptar una dictadura pero eso significa que debemos asumir nuestro errores, nuestras ingenuidades, nuestro creer que ellos, los neoliberales, esperarían tranquilos que llegue el momento de votar para tratar de asumir nuevamente el gobierno.
Este momento es muy importante, deberán ser días de lucha, pero también de análisis: por qué sucedió esto? ¿Por qué no pudimos consolidar la unidad? ¿Por qué no se consideró que el pueblo era el respaldo, el sustento, la base del cambio?
Estas reflexiones deben darnos la claridad para los siguientes pasos. Estos pasos deben ser estratégicos y sabiendo quienes son los aliados.
Este golpe nos permitió ver claramente las dos veredas, los de enfrente, los neoliberales, terratenientes, ganaderos, empresarios y por otro lado, el pueblo que ya ha madurado, que va desarrollando su conciencia crítica. Hoy, el golpista Franco y sus secuaces quieren hablar con Lugo, hoy se retiraron 3 embajadas del país, hoy el pueblo está en las calles. Estos hechos son señales de inmenso cambio y triunfo de la democracia participativa. Estamos en la lucha, estamos vivos, estamos con nuestras utopías firmes…. ¡Viva el Paraguay!”, concluye Cira Novara.

Alberto Croce, Director de la Fundación SES de Buenos Aires y coordinador de LATINDADD, me comenta personalmente que “he expresado en los comunicados (6) nuestro repudio a esto que sucedió.
Amparados en las formalidades democráticas, estos sectores golpistas derrocaron a un gobierno popular. Con muchas limitaciones, es cierto, pero sin duda más cercano a las necesidades e intereses de su pueblo que los que lo han derrocado.
El juicio político fue una farsa. Acusar a Lugo de organizar esta matanza, es una cretinada. Sobre todo cuando, en realidad, los benefició a los golpistas... En todo caso, ahora habrá que ver qué hace el Mercosur y la UNASUR. Espero que no convaliden este golpe y busquen mecanismos de sanción. El primero será en Mendoza, la semana próxima, donde se reúne la cumbre del Mercosur. Hay que ir siguiendo los acontecimientos y mantener posturas firmes. No se puede dejar pasar esto”, concluye Croce.

Viceministra de Minas y Energía renunció y calificó de golpista a Franco
Mercedes Canese presentó este lunes 25 de junio su renuncia indeclinable a su cargo al frente del Viceministerio de Minas y Energía, dependiente del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC). Expresó su desacuerdo con la destitución de Fernando Lugo. La exviceministra tildó de “golpista” al actual presidente de la República, Federico Franco, y lo acusó de “favorecer a las grandes transnacionales y estar en contra del pueblo”, entre otras cosas, según consta en la carta de renuncia de Canese. En el documento oficial – difundido por la agencia EA (7) - presentado ante la citada Cartera del Estado, con copia a la Presidencia, se insta a los “buenos colorados y liberales” a no aceptar lo que considera un atropello a la Constitución Nacional. Igualmente, en su informe de cierre de gestión, defendió los logros obtenidos en el campo energético, como el inicio de obras para la línea de 500 Kv, la decisión de impulsar el metrobús eléctrico, el aumento de tarifa para venta de energía a Argentina, entre otros.
Duro repudio del Parlamento Europeo

Un destacado grupo de Europarlamentarios acaba de enviar una nueva carta. La carta se dirige en particular a instancias europeas y países miembros pidiendo una postura firme de condena al golpe. Está siendo difundida también en el cabinete en la sombra (o alternativo) del Presidente Lugo.
La carta está firmada por Jürgen Klute –Alemania, Gianni Vattimo –Italia, Jean-Luc Mélenchon –Francia, Raul Romeva –Vicepresidente del Bloque Verdes-Greens Efa, Gabriele Zimmer –Presidenta del Bloque Gue-Ngl, Marisa Matias –Portugal, Martina Anderson -Ireland, Nikolaos Chountis –Grecia, Ivo Vajgl –Slovenia, Amelia Andersdotter –Suecia, Barbara Lochbihler –Alemania, Lothar Bisky –Alemania, José Bové –Francia, Bart Staes –Belgica, Conerlia Ernst –Alemania, Ana Miranda –España, Helmut Scholz –Alemania, Satu Hassi –Finlandia, Sabine Lösing –Alemania, Francisco Sosa Wagner –España, Alda Sousa –Portugal, Marie-Christine Vergiat –Francia, Yannick Jadot –Francia, Martin Häusling –Alemania, Miloslav Ransdorf -Rep Checa, Franziska Keller –Alemania, Jean Lambert –Inglaterra, Ulrike Lunacek –Austria, Catherine Grèze –Francia.

Se subraya que “Nosotros, diputados del Parlamento Europeo, queremos manifestar nuestra profunda preocupación frente al Golpe de Estado contra el presidente democráticamente elegido, Fernando Lugo.
El Presidente Fernando Lugo, fue destituido por medio de un juicio político promovido por el Congreso de Paraguay -mayoritariamente controlado por la oposición- otorgándole menos de 24h para prepararse y tan sólo dos horas para presentar su defensa.
Ninguna prueba que justificaba las acusaciones fue presentada en el libelo acusatorio por los acusadores. Los abogados del presidente pidieron más tiempo para poder presentar una defensa adecuada, pero esta fue negada. Al no respetar el debido proceso, es claro que las esenciales normas democráticas fueron violadas y esto nos hace creer que lo que se llevó a cabo en Paraguay fue en efecto un Golpe de Estado Parlamentario. La destitución del presidente había sido planeada desde tiempo atrás por la oposición, quienes estaban tan solo esperando una oportunidad para llevarlo acabo (según revelan los informaciones enviadas en el 2009 desde la embajada de EE.UU. en Paraguay). El Vice-Presidente de F. Lugo, quién fue nombrado inmediatamente por la oposición parlamentaria como "nuevo presidente" había amenazado de utilizar el mismo procedimiento de juicio político, bajo justificaciones varias.
La UNASUR, la OEA, el MERCOSUR, la CELAC y los países del ALBA, han condenado el juicio político contra el presidente constitucional del Paraguay, Fernando Lugo. Como parlamentarios europeos, nos unimos a esta condena, y llamamos a nuestros respectivos gobiernos y a la UE a tomar las medidas necesarias para suspender los acuerdos de cooperación con el Paraguay, hasta que no vuelva el orden democrático y el Estado de Derecho.
Invitamos por lo tanto a los gobiernos europeos, que se han negado a condenar este Golpe de Estado, a reconsiderar esta posición inaceptable para la democracia, y en particular para países como Paraguay que han vivido durante tantos años bajo regímenes autoritarios. Hacemos también un llamado a la Comisión Europea para que condene ejemplarmente este Golpe de Estado, y suspenda cualquier tipo de cooperación e inicie una investigación bajo al régimen del sistema de facilidades arancelarias SGP.
Manifestamos nuestra profunda solidaridad con el pueblo paraguayo, que se encuentra resistiendo pacíficamente frente a esta ruptura violenta del Estado de Derecho. Pedimos a la Alta Representante de la UE, Catherine Ashton, que condene fuertemente este ataque a la democracia, y que envíe una misión internacional para clarificar las responsabilidades en la masacre de Curuguaty. Esperamos que la Unión Europea tome todas las medidas necesarias para garantizar el restablecimiento del orden constitucional y la Soberanía Popular, y apoye las organizaciones regionales que rechazan el gobierno de facto y buscan una solución pacífica a esta crisis”, concluye la carta.

Jürgen Klute, teólogo y Europarlamentario Alemán ha declarado al Observatorio SELVAS (8) que “esta carta pide a sus respectivos gobiernos, al igual que a la Alta Representante de la UE, condenar este ataque a la democracia, y para pedir una misión internacional para aclarar la responsabilidad en la masacre de Curuguaty” (9).

NOTAS
  1. http://www.diariouno.com.ar/edimpresa/2012/06/27/nota303770.html
  2. http://otramerica.com/radar/derrocados-y-golpistas-quieren-evitar-las-sanciones-de-mercosur-a-paraguay/2098
  3. http://www.voltairenet.org/Destitucion-de-Lugo-es-violacion
  4. http://ea.com.py/wallerstein-el-escandaloso-golpe-debe-ser-resistido-por-todas-las-personas-democraticas-y-progresistas-del-mundo/?utm_source=feedburner&utm_medium=feed&utm_campaign=Feed%3A+semanarioea+%28E%3Fa%29
  5. http://www.campanaderechoeducacion.org/v2/es/noticias/212-por-la-democracia-en-paraguay-en-latinoamerica-y-en-el-mundo.html
  6. www.fundacionses.blogspot.com
  7. http://ea.com.py/viceministra-de-minas-y-energia-renuncio-y-califico-de-golpista-a-franco/
  8. Diversidadenmovimiento.wordpress.com
  9. http://www.juergen-klute.eu/
Cristiano Morsolin, operador de redes internacionales, trabaja en Latinoamérica desde 2001 con experiencias en Paraguay, Ecuador, Perú, Colombia, Bolivia, Brasil. Co-fundador del Observatorio sobre Latinoamérica Selvas. Autor de varios libros, investigador y panelista internacional.

La trampa paraguaya

La trampa paraguaya
Josep Cruelles Se consumó el golpe de Estado en Paraguay. En menos de 30 horas, en juicio “sumarísimo”, sin posibilidad prácticamente de defensa, mediante un acuerdo tácito entre las dos principales fuerzas parlamentarias del país: Liberales y Colorados sumaron sus votos para apartar del gobierno a su Presidente, elegido directa y democráticamente por el pueblo Fernando Lugo.
Es inútil debatir si fue una trampa tendida a Lugo o simplemente aprovecharon la ocasión, activando un plan preestablecido para acontecimientos que lo permitieran. Aprovechando una legislación que permite al senado juzgar directamente a su presidente, utilizando pues la constitución como coartada, se activó la farsa y el senado más corrupto de América Latina, dictó sentencia por “mal desempeño de sus funciones”. El vicepresidente, Federico Franco asumió rápidamente. Ahora este elemento del Partido Liberal es el nuevo presidente de Paraguay.
La matanza de Curuguaty
La Liga Nacional de Carperos (utilizan carpas en los asentamientos) ocupó una hacienda propiedad de Blas Riquelme, ex senador del Partido Colorado en Curuguaty, considerando que Riquelme se había apropiado gratuitamente de esas tierras, 2000 hectáreas antes propiedad del Estado. Riquelme es dueño de la estancia Morobí de 70.000 hectáreas, donde se encuentra la zona ocupada. Sus propiedades fueron adquiridas de la forma más oscura durante la dictadura de Stroessner.
Según la versión oficial, un grupo de 300 policías pertenecientes a los GEO, cuyos oficiales y miembros de élite fueron entrenados en Colombia para la contrainsurgencia, entraron a desalojar a los Carperos. Se supone, que los campesinos, emboscaron e iniciaron los disparos. El resultado, diecisiete muertos de los dos bandos, de ellos seis policías y ochenta heridos. Según versiones de las organizaciones campesinas, las armas que tenían eran machetes, escopetas y algunos revólveres calibre 22 y 37, normales en el campo. Algo no cuadra.
Lugo cesó al ministro del Interior, perteneciente al Partido Liberal, hasta el momento teórico aliado político y lo sustituyó por otro del partido Colorado Rubén Candia Amarilla, ex miembro del Grupo de Acción Anticomunista creado en los ’80 en los últimos tiempos de la dictadura . Esto hizo que el Partido Liberal tomase la decisión de apoyar el juicio a Lugo y hacerse con el gobierno a 10 meses de las elecciones. Una buena oportunidad para ganar terreno a los Colorados favoritos en las encuestas.
La Cámara alta de Paraguay convocó sesión tras los hechos de Curuguaty. Juan Bóveda, de UNACE (escisión del Partido Colorado y tercer partido en votos), instó a investigar al mandatario. Jorge Oviedo Matto acusó directamente a Fernando Lugo por “inanición del Gobierno para combatir y eliminar a los grupos violentos que intentan conseguir sus objetivos mediante el caos y la violencia” .
Paralelamente, a petición de Olga Ferreira, del partido Patria Querida, se convocó una reunión extraordinaria para tratar del violento desalojo ocurrido.
Así se produjo esa parodia de juicio, de un solo día, con escasas dos horas para preparar la defensa, sin posibilidad de intervención mas allá del defensor, con acusaciones que según ellos no necesitaban pruebas y con la bendición de la iglesia en revancha a su “obispo descarriado”. En definitiva un golpe parlamentario que recuerda mucho el hondureño, en versión revisada y mejorada.
La presencia de los cancilleres, en pleno, de UNASUR parece que no impresionó demasiado a los golpistas, que junto a la OEA siguen el guión de Honduras. La OEA hace de “policía bueno”, pidiendo garantías para desviar la atención, pero no cuestionando lo esencial del proceso.
Lugo y la Reforma Agraria
Paraguay es el cuarto productor mundial de soja, que supone el 42% de sus exportaciones y el noveno productor de carne bovina. Por el contrario, tiene el PIB mas bajo de Sudamérica y el PIB per cápita menor después de Bolivia. Según cifras de la CEPAL (2011), la pobreza en Paraguay asciende al 53% de su población de casi 7.000.000 de habitantes, de los cuales el 30% vive en la pobreza extrema. Según el censo agrario de 2008, el 2,5% de las fincas detenta el 85% de la tierra.
"El principal de los cuatro puntos del programa de Lugo era una reforma agraria integral, pero ese ha sido su gran fracaso. Ni siquiera se implementaron políticas serias de apoyo a las “colonias”, los establecimientos campesinos creados en la década del 70. Estos se quedaron sin carreteras, asistencia médica, escuelas y absolutamente abocados a la miseria. En definitiva, el gobierno de Lugo no hizo nada contra el poder real de Paraguay: los terratenientes y el sector agroexportador". Las timidas medidas dirigidas a marcar límites en la venta de tierras a extranjeros y de exigencia de títulos de propiedad, tuvieron una respuesta airada por parte de los terratenientes y de la misma diplomacia brasileña que salió en defensa de sus ciudadanos brasileños (Brasiguayos). Lugo tuvo que suspender esta medida y garantizó la “seguridad y respeto” a la propiedad privada.
La Federación Nacional Campesina y la Mesa Coordinadora Nacional de Organizaciones Campesinas fueron las organizaciones que apoyaron a Lugo en su elección. Las dos, en general, utilizaron métodos de protesta pacíficos. Acordaron establecer una tregua ante la la nueva presidencia, con la esperanza de una reforma agraria. De tal manera que el actual Gobierno pasó a tener la menor tasa de ocupaciones de tierras de los últimos 20 años"
En respuesta al incumplimiento de las promesas formuladas por Lugo, y ante la política de acuerdo planteada por las organizaciones tradicionales, nació hace dos años la Liga Nacional de Carperos. Estos también fueron protagonistas entre noviembre y marzo pasado, de la ocupación de las plantaciones de soja del Alto Paraná, grandes extensiones monopolizadas por los llamados "Brasiguayos", ricos agricultores brasileños instalados en la zona más fértil de Paraguay desde hace 40 años y que tras la caída de Stressner compraron miles de hectáreas en la región de la triple frontera con Brasil y Argentina. De hecho, desde esa época, unos 10 millones de hectáreas pasaron ilegalmente del INDERT (Instituto Estatal de desarrollo Rural y de la Tierra) a particulares ligados a anteriores gobiernos, exmilitares, cargos policiales….
La mano de Monsanto
Toda la soja cultivada en Paraguay es transgénica, con una producción de 7 millones de toneladas. El agronegocio extractivista, en manos de la oligarquía terrateniente y la trasnacional Monsanto, son la base fundamental de la economía Paraguaya.
Monsanto facturó el 2011, 30 millones de dólares, libre de impuestos solo por el uso de sus semillas transgénicas de soja en Paraguay. La influencia de estos sectores en los tres poderes del estado es total y afecta a todas las organizaciones, incluso a las que dieron apoyo a Lugo.
La legalización de nuevos transgénicos se ha convertido en uno de los ejes de la batalla entre el Ministerio de Agricultura y Ganadería controlado por los liberales junto a la Unión de Gremios de Producción (UGP), contra el Servicio Nacional de Calidad y Sanidad Vegetal (SENAVE) que se ha negado a inscribir la semilla para algodón transgénico Bollgard BT de Monsanto por carecer de los dictámenes de la secretaria de Ambiente, como exige la legislación. El Ministerio de Agricultura si había autorizado su siembra.
El control por parte la UGP de los principales medios de difusión del país y sobre todo del diario ABC, le han permitido iniciar una campaña sistemática de desprestigio, acoso y derribo de todas las personas e instancias que se han opuesto a sus planes. Han acusado de corrupción al Ministro de Ambiente, de Salud y a Miguel Lovera, presidente del SENAVE, es decir a todos los que se opusieron al uso comercial de la semilla transgénica.
Paralelamente, para evitar el control de los funcionarios autónomos, la cámara de diputados, donde Lugo no tiene ningún tipo de control, aprobó un proyecto de ley para crear una dirección de Bioseguridad dependiente del Ministerio de Agricultura que sustituirá a la “molesta” e independiente Comisión de Bioseguridad actual. A partir de ese momento no existirán problemas para dar luz verde a cuantas semillas transgénicas proponga Monsanto.
La debilidad de Lugo
Fernando Lugo fue apoyado por los movimientos campesinos, para poder llegar a la presidencia en 2008. Su organización, el Frente Guasú, es relativamente pequeña, para nada homogénea y además se integró en una coalición heterogénea llamada Alianza Patriótica para el Cambio. En esta coalición el partido hegemónico es el Partido Liberal Radical Auténtico.
Este es un partido de terratenientes, cuyo máximo representante es el ahora presidente de facto Fernando Franco. Lugo solo contaba entre los candidatos que salieron electos con unos pocos diputados y senadores fieles. y gano su presidencia por la ilusión y el empuje del movimiento campesino, obrero y estudiantil. Fue un consenso popular para el cambio que no se correspondía con su estructura política organizada. Desde el principio, Lugo fue objeto extorsiones y amenazas, fue un rehén político en manos de un parlamento y senado hostil.
Con este punto de partida de debilidad, la presidencia de Fernando Lugo nunca supo construir una verdadera fuerza popular organizada capaz de enfrentarse a una derecha hegemónica en el parlamento, en su propia coalición y en los poderes fácticos. La política de acuerdos de Estado con sus opositores, herederos políticos de Strossner, les cedió totalmente la iniciativa y anuló su principal capital político: El apoyo de los movimientos sociales.
La Constitución reformista de 1992 que sustituyó a la del dictador Strossner de 1967. Esta contiene un artículo, denunciado como contrario a los principios de derecho internacional, que ha servido para amenazar y finalmente destituir a Fernando Lugo. Paradójicamente, los principales responsables de la dictadura de Strossner, hoy fiscales de ese “juicio político”, nunca fueron encausados. Los mismos criminales que se repartieron las tierras del estado destinadas a una reforma agraria, contenida en los principios de aquella constitución, simplemente, se las repartieron en “familia”.
Pero Lugo tampoco llevó a cabo la siempre aplazada reforma agraria que debería haber acabado con los privilegios adquiridos durante la época de la dictadura y además aprobó una dura ley antiterrorista, bajo presión de los EEUU e impulsó la militarización de las áreas rurales con la excusa de combatir a un grupúsculo conocido como el “Ejército del Pueblo Paraguayo
Por el contrario, durante el mandato de Lugo se consolidó y expandió un modelo monoproductivo basado en la soja transgénica y el agronegocio, en las antípodas del cooperativismo y la soberanía alimentaria que reclaman las organizaciones campesinas. Definitivamente, se consolidó el poder de los grandes propietarios, mientras cientos de miles de campesinos pobres reclaman la devolución de las tierras que se robaron al estado. La presión fiscal, de apenas un 13%, hace de este país un paraíso para los “negocios”.
Fruto de ello, 2011, dio el crecimiento del PIB más alto de América Latina, eso si, como consecuencia del crecimiento del agronegocio, sin contrapartidas en el reparto de la riqueza, ni en la reducción de la pobreza. La segunda más alta de Sudamérica.

El rol estratégico de Paraguay
Paraguay se encuentra en una posición geoestratégica vital en la región (prácticamente el corazón del Cono Sur) y cuenta con recursos naturales y energéticos importantes. Recientemente se han descubierto las reservas de Titanio más importantes del Planeta y otras enormes de Uranio.
La Triple Frontera y su constante situación de descontrol, “por la que circulan contrabandistas, terroristas y narcotraficantes”, fue la justificación para instalar la base militar estadounidense de Estigarribia en la provincia de Chaco. Pero las reservas acuíferas, los yacimientos ya mentados, los intereses de Monsanto, la ubicación estratégica en la región para lo que se ha venido llamando guerra de IV generación, son en realidad la verdadera razón. Los intereses de Estados Unidos, que sin duda esta detrás del golpe no coinciden exactamente con los de UNASUR,
De otra parte, la conexión y dependencia de la economía paraguaya de la brasileña es fundamental. El 44% de las exportaciones se dirigen a ese país, siendo los otros dos, en importancia, Uruguay y Argentina. Con las importaciones solo cambia el orden, siendo Argentina el primer país proveedor y Brasil el segundo. Paraguay exporta el 84% a Brasil de la energía producida en la mayor central hidroeléctrica del mundo: Itaipú y prácticamente el 100% de la producida en la de Yacyretá, compartida con Argentina. Es decir, Paraguay es un país absolutamente dependiente de sus vecinos, socios de Mercosur y miembros de UNASUR, que no reconoce el juicio y destitución de Lugo.
Un cierre de fronteras, o medidas económicas por parte de estos países, pondrían en serios problemas a la economía Paraguaya que además no tiene salida al mar. La actitud de Brasil y Argentina, en este caso es fundamental para dificultar el la continuidad golpista y animar la resistencia ciudadana.
La resistencia al golpe
Miles de manifestantes llegaron desde los barrios de Asunción y en autobuses desde el interior abarrotando la Plaza de Armas cercana al congreso. Se cortaron carreteras en las provincias, donde los campesinos son el principal baluarte de apoyo a Lugo. Miles de Paraguayos residentes en Argentina se movilizaron y entraron al país con la intención de parar el golpe.
La TV pública fue tomada por los trabajadores y en sus puertas una concentración y asamblea permanente es transmitida instantáneamente. El pueblo continúa así manifestándose días después y seguro que se producirán ocupaciones e incluso conatos de resistencia armada. La solidaridad internacional, especialmente de los movimientos sociales de Argentina y Brasil cobra especial importancia en este caso, mas allá de lo que puedan ser las acciones diplomáticas de sus gobiernos, de UNASUR o del Alba.
Las acciones de apoyo a la resistencia Paraguaya desde las fronteras y el corte y control de carreteras sin esperar al posible cierre oficial, pueden emprenderse desde ya, de hecho están anunciadas al acabar de escribir este articulo. La Liga Nacional de Carperos lanza una convocatoria desde todas las provincias y todos los sectores para marchar sobre Asunción.
Existe un Alba de los pueblos en América Latina. Paraguay no puede repetir la suerte de Honduras.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

Los Nuevos "Patriotas".

https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiz5KTtHHzDSSr4f4LZAbIfUvr_N7AgsCn-sbbJQMGPVAf1aXgBICrTL0FssoTq0gxnwZzBg_n1fcp0vesC8nI55i__fl783Ol2Rxx7zEVcqoWHXozMLuOwlWsAtke3EwQ3bmqXNmjBRBHr/s320/081115220601648.jpg Los Nuevos "Patriotas".de Mario Ferreiro,  Viernes, 29 de junio de 2012 a la(s) 4:59 ·

No les creo Nada
  Los que ahora se rasgan las vestiduras profesando su patriotismo a los cuatro vientos, son los mismos no tuvieron empacho alguno en rifar las tierras públicas del país instalando la mayor colonia brasileña fuera de las fronteras de ese gran país. Los que por más de 60 años se apropiaron de bienes ajenos y los revendieron sin respetar franjas de seguridad fronteriza ni el destino de miles de compatriotas campesinos pobres desplazados cruelmente de sus pequeñas parcelas.
  Los mismos que hoy enarbolan orgullosos la roja blanca y azul y se escudan detrás de la estrella y el león guaraní, son los que firmaron los tratados de Itaipu y Yacyretá con claras ventajas para la contraparte, a cambio de fortunas particulares que hasta hoy sustentan gran parte de la rígida estructura social y política de nuestro país.
  Estos nuevos patriotas que nos agitan fantasmas de la Triple Alianza y se llenan la boca con la palabra soberanía son los que intercambiaron presos como figuritas para hacerlos desaparecer en virtud del horrendo Plan Cóndor, de exterminación de opositores a los regímenes que aquellos años imperaban en la región. En esa época  no sentían pudor alguno por esa trágica y brutal manera de integrarse con los gobiernos militares de Argentina, Chile, Brasil, y Uruguay.
  Los actuales representantes a ultranza de nuestra nacionalidad son los mismos que se embolsaron para si durante décadas los beneficios de las binacionales, ganando todas las licitaciones posibles y apropiándose de compensaciones que recién desde hace algunos meses comenzó a cobrar nuestro país por primera vez en su historia.
  Son ellos, los dueños de las tierras malhabidas y sus cómplices, los que quieren inversión extranjera sin más beneficio que para unos pocos lobistas locales, los que rifan el presupuesto pidiendo ampliaciones para sus propios operadores políticos, los que siempre trabaron el crecimiento de la inversión social, los que se niegan a pagar impuestos más justos.
  ¿Qué curioso no? Ahora nos dan clase de patriotismo los que prostituyeron a las Fuerzas Armadas hasta desproteger absolutamente nuestras fronteras. Los que golpearon una y otra vez las puertas de los cuarteles en cada crisis política, los que expresaron que la palabra de un soldado vale más que mil leyes.
  Los nuevos patriotas son los que por su conducta exponen a la gente común a pasar por sufrimientos y privaciones innecesarias, simplemente para intentar justificar lo que hicieron sin pensar, -o lo que es peor-, sin que les interese un ápice ese padecimiento de su propio pueblo.
Cometen al final de todo la peor de las perversidades: culpan a los demás de algo que ellos mismos perpetraron, una vez más, pensando solamente en sus propios y mezquinos intereses.
  Yo simplemente no les creo nada.

jueves, 28 de junio de 2012

El golpe de estado parlamentario contra el presidente Fernando Lugo en Paraguay



El golpe de estado parlamentario contra el presidente Fernando Lugo en Paraguay



Primero ocurrió el Golpe de Estado en Venezuela contra el Presidente constitucional Hugo Chávez Frías en 2002; luego le siguió el referéndum secesionista en Bolivia en 2006, cuyo propósito era fracturar el país en dos partes. De esa forma, los sectores oligárquicos pretendían crear un espacio político y territorial para su propio beneficio en lo que son las regiones petroleras, ganaderas y bosques localizados en la porción oriental del país, todo ello bajo el palio de la creación de unas ¨autonomías regionales¨, conformadas al margen de aquella definida en la Constitución de Bolivia. Luego ocurrió el Golpe de Estado contra Manuel Zelaya en Honduras en 2009. Consumado el mismo y deportado del país su presidente, se aguardó por parte del gobierno usurpador sostenido por una Junta Militar, a que expirara el término constitucional del presidente depuesto, para dar paso a unas nuevas elecciones. Sin la participación de Zelaya, ante los ojos de la comunidad internacional, organismos como la OEA permitieron la instauración de un gobierno de apariencia democrática como es el de Porfirio Lobo, revocando el decreto de suspensión de Honduras del organismo internacional.
Más adelante sigue la frustrada intentona de Golpe de Estado contra el presidente Rafael Correa en Ecuador en el año 2010. Como en el caso de Venezuela, la movilización del pueblo y la fidelidad de la mayoría de los integrantes de la Fuerzas Armadas al orden constitucional, evitaron un desenlace similar al ocurrido en Honduras.
Hoy nos enfrentamos a otra modalidad golpista en América Latina: el Golpe de Estado Parlamentario contra el presidente de la República de Paraguay, Fernando Lugo.
En todos estos escenarios, uno de los elementos comunes es la presencia de la mano siniestra de Estados Unidos a través de sus embajadas y estamentos militares, junto a los sectores oligárquicos nacionales en la planificación y ejecución se los sucesos.
Quien pensaba que los Golpes de Estado en América Latina eran cosa del pasado erró. Quien afirmaba que con el fin de la Guerra Fría, Estados Unidos abandonaría su injerencia en los asuntos internos de nuestros países, también erró. Lo único que ha cambiado es la forma de pretender echar abajo gobiernos que no sigan las pautas dictadas por el Departamento de Estado de Estados Unidos en protección de sus intereses geopolíticos. En el pasado y presente de nuestros pueblos, sigue eslabonándose dentro del marco de sus luchas la voluntad de avanzar en el rescate de nuestros derechos soberanos; el forcejeo por una mayor integración económica y política; la afirmación de un nuevo tipo de democracia. Se trata de una democracia participativa que garantice el acceso de nuestras poblaciones, no sólo a decidir quiénes representan en forma más adecuada nuestros verdaderos intereses; sino sobre todo, la voluntad por darle una mayor participación a estos sectores populares en los beneficios devengados de la explotación de sus recursos naturales. Esa es la hoja de ruta que hoy se afirma en la construcción de una nueva América Latina.
Paraguay es una nación suramericana que ubica en su región central oriental. Como país, no tiene costas que le brinden directamente acceso al mar. No obstante, cuenta con un inmenso sistema de ríos navegables a través de los cuales los buques y embarcaciones logran acceso al Océano Atlántico. Paraguay tiene una población relativamente pequeña para su extensión territorial, la cual fue estimada en 2011 en 6,340,000 habitantes. Su superficie abarca 406,752 Km.2, lo que es algo más de 43.6 veces el tamaño de Puerto Rico. Si bien obtuvo su independencia de España el 15 de mayo de 1811, no fue sino hasta el 10 de septiembre de 1880 que la misma fue reconocida. En su subsuelo ubica el mayor acuífero de América Latina y ciertamente uno de los mayores en el mundo. Es además, una de las zonas más ricas en biodiversidad. Es también uno de los principales exportadores en América del Sur de energía eléctrica, el cuarto productor mundial en soja y el noveno en exportación de carnes. Paraguay, no obstante su desigual distribución de la riqueza, se considera la segunda mayor economía en expansión en 2010 el mundo, luego de Catar y ciertamente la mayor en América Latina.
En 1821 Paraguay sufrió los efectos de lo que ha venido a conocerse como la ¨Guerra de la Triple Alianza¨. En ella Argentina, Brasil y Uruguay, incitados y financiados por Inglaterra, invadieron el país. De acuerdo con Julio José Chiavenato en su libro ¨Genocidio Americano: la Guerra del Paraguay¨ (1984), los efectos de esta guerra fueron tan horribles para Paraguay que de una población existente en el país al comienzo de la guerra, estimada en 800,000 personas, murieron 606,000; es decir murió el 75.75% de su población. De 194,000 sobrevivientes, sólo 14,000 fueron hombres, de los cuales apenas 2,100 sobrepasaban los 20 años de edad. Ese es el precio que Inglaterra y sus aliados del patio le impusieron a este pueblo en aras de sus derechos de navegación y concesiones comerciales en los ríos navegables paraguayos. En la Guerra, Paraguay, además, el país perdió casi la mitad de su territorio, repartido entre los países vencedores. Entre los efectos económicos de la guerra, Paraguay vino obligado a pagar una inmensa fortuna a Inglaterra que fue quien costeó la intervención de la Triple Alianza. El país, bajo tales circunstancias, se desarrolló en adelante de espaldas a sus vecinos.
Durante el siglo XX, las políticas de Paraguay estuvieron entrecruzadas por los efectos de otros dos conflictos: primero, la Guerra del Chaco sostenida con Bolivia; segundo, una Guerra Civil en 1947. Esta última trajo, en adelante, sucesivos gobiernos militares hasta que finalmente, en 1954, el Dictador Alfredo Stroessner llegó al poder. Stroessner fue eventualmente el fue candidato a la presidencia bajo la bandera el Partido Colorado y así, sucesivamente, dirigió el país con mano de hierro hasta1989 cuando otro Golpe de Estado, pondría fin a su dominio de más de tres décadas en la vida política del Paraguay.
El Partido Colorado, ya depuesto Stroessner, continuó al frente el gobierno. Fue éste el que impulsó en junio de 1992 una nueva Constitución. En 1993 Juan Carlos Wasmosy fue electo por dicho Partido como el primer presidente civil del país en más de 40 años. Su mandato, sin embargo, no estuvo exento de asonadas golpistas como fue la del Jefe de las Fuerzas Armadas, General Lino Oviedo, que llevó al país a otro periodo de inestabilidad política. En las elecciones de 20 de abril de 2008, tras más de sesenta años de control en el país, en una elección histórica, una coalición de fuerzas políticas muy amplia, llevó a la Presidencia del país a un ex Obispo de la Iglesia Católica, Fernando Lugo terminando así la continuidad del Partido Colorado en la presidencia de la República.
Desde la llegada al poder de Fernando Lugo, la oligarquía en este país ha hecho cuanto está a su alcance para torpedear las iniciativas incluidas en el programa de gobierno que le llevó a la presidencia. Se trata de iniciativas donde se impulsan reformas que ciertamente puede decirse no son lo radicales que un país como Paraguay necesita, sobre todo en un contexto donde el 2% de su población posee el control de más de 80% de la tierra. De acuerdo con datos ofrecidos por la CEPAL en 2011, la pobreza en Paraguay alcanza al 53% de la población, de la cual el 19.4% se sitúa en pobreza extrema, llevando a Paraguay hoy a ser el país el mayor abismo entre pobres y ricos a la hora de analizar la distribución de la riqueza en América Latina.
Durante su gobierno, Lugo intentó atender problemas que afectan las comunidades indígenas, por ejemplo, creando programas de asistencia alimentaria para ésta logrando incorporar al mismo al menos 31,454 adultos. Esta cifra, si bien podría parecer muy pequeña a la hora de analizar el impacto de las transformaciones en países como Bolivia, Venezuela o Ecuador, por mencionar algunos, resulta un gran salto en un país donde jamás antes un programa así había tenido la posibilidad de desarrollarse en apenas dos años.
Se ha indicado que el Golpe contra Lugo es un Golpe Parlamentario. En efecto, lo es. Allí se ha recurrido a una disposición de la Constitución, específicamente su Artículo 225, que permite a la Cámara de Diputados establecer la base legal para enjuiciar a un Presidente, no porque haya cometido algún delito o haya incurrido en conducta que represente una amenaza para el país o su soberanía, sino sencillamente, a base de lo que a juicio de sus juzgadores suponga, que el Presidente, Vice Presidente, Ministros u otros funcionarios no estén desempeñando, como ellos esperan, las funciones de su cargo. Dado este paso, le corresponde entonces al Senado llevar a cabo el juicio y dictar la sentencia.
Así, en un juicio sumario en el cual Lugo no tuvo siquiera la oportunidad de contar con tiempo suficiente para enfrentar la alegaciones en su contra; sin que tuviera plena y efectiva oportunidad de estar debidamente representado en el juicio político en su contra, el Senado paraguayo le destituyó designando en su lugar al Vice Presidente del país, Federico Franco. Es por eso que organismos tales como la obsoleta OEA se niega a utilizar el término ¨Golpe de Estado¨ bajo el fundamento de que la sucesión presidencial se ha producido conforme al ordenamiento legal prevaleciente; es decir, se valida así la farsa de juicio político llevado a cabo en contra de Fernando Lugo, aunque en apariencia el Organismo tome excepción de la forma asumida en el proceso.
Tanto los países agrupados en UNASUR, como los países del ALBA, los ministerios de Relaciones Exteriores de los países de América del Sur, Centro América, Cuba, entre otros, han hecho expresiones en abierto rechazo al Golpe de Estado Parlamentario contra el Presidente Fernando Lugo y han adelantado que tomarán medidas diplomáticas y económicas contra el gobierno usurpador del Federico Franco. Organizaciones no gubernamentales y distinguidas personalidades en América Latina también han dejado sentir su protesta y su denuncia por este atropello. El debate del asunto, además, será llevado al seno de la OEA donde este organismo regional tendrá, una vez más, la oportunidad de decidir, no como en el caso del Golpe de Estado contra Manuel Zelaya, si en sus políticas hacia los estados integrantes del Organismo, se respetará la constitucionalidad y legalidad de los procesos electorales; o sencillamente, si la OEA una vez más, será el sello de goma de las políticas injerencistas e imperialistas de Estados Unidos en este Hemisferio.
En Paraguay, de una vez por todas, se define hoy día el Rubicón de América Latina. De ahí la importancia del llamado del Presidente Fernando Lugo a concretar, desde la calle misma, el denominado “gabinete por la restauración democrática” en el cual, como ha indicado, caben “todas las fuerzas que quieren resistir al gobierno de Franco.”

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.